Seguro que habrás leído en algunos sitios que una de las mejores maneras de ganar dinero en las apuestas es usando los bonos por abrir cuentas.
Seguramente también habrás oído historias terribles de veteranos en las apuestas con mucha experiencia y conocimientos que dicen ser baneados de las casas al intentar conseguir dichos bonos, habida cuenta de su supuesta habilidad para elegir mejores cuotas que el resto de los mortales.
Sin duda, este tema de los bonos de apuestas es muy interesante, porque la gran mayoría de casas ofrecen alguna versión de los mismos, y la práctica totalidad de ellas ofrecen el típico bono de bienvenida, que en ocasiones parece una ganga.
Pero tal ganga, viniendo de un mundo tan competido y perro como el de las apuestas, no es tan ganga, después de todo.
Seguro que ya sabrás lo difícil que es ganar en el mundo de las apuestas, sobre todo si estás en un país como España, donde las cuotas son bastante peores que las que puedes encontrar en otros mercados internacionales.
Es ahí, en la vieja España, donde la gente intenta usar este tipo de estrategias y “regalos” que son los bonos para apostar: los tan buscados bonos de bienvenida.
Conseguir los bonos de apuestas y el value
A ver si puedo explicar esto de una manera que se entienda fácilmente.
Para empezar, los típicos bonos de apuestas deportivas no son diferentes en sí a los bonos de casinos, poker o de trading.
Todos ellos tienen algo en común, normalmente.
Esto no es otra cosa que el hecho de que para poder conseguir que nos sean abonados tendremos que hacer un volumen mínimo de apuestas.
Bien, como podrás comprender, ese volumen no va a ser un volumen bajo de las mismas, sobre todo en relación a la cuenta que vas a abrir.
Por ejemplo, si abres una cuenta de 200 euros o dólares, te van a dar un bono de la misma cantidad, pero para poder retirarlo vas a tener que apostar por un valor de 20.000 euros, y no solo eso, sino que tendrás que hacerlo en los siguientes tres meses.
¿Por qué esto es un problema tan grande a la hora de conseguir el bono?
Pues por una razón muy sencilla: ese volumen en ese tiempo determinado casi nos obliga a realizar muchas apuestas en las que no tenemos value. Es decir, nos obliga apostar por apostar.
El tema del value en las apuestas significa que hay apuestas de los bookies en las que los mismos no están poniendo un precio “adecuado” según nuestros propios cálculos.
Esto es algo que, obviamente, no ocurre muy a menudo.
No vamos a encontrar value en todas las apuestas, y ni siquiera en una cantidad significativa de las mismas.
El value lo encontraremos en una cantidad muy pequeña de las apuestas, y es en esas en las que tenemos que apostar, con la posibilidad de que si nuestro “análisis value” funciona podamos obtener ganancias a largo plazo con un yield aceptable.
En este sentido es muy complicado que en dos meses, que es un tiempo teórico que nos puede dar un bookie X para conseguir el bono, consigamos un número de “apuestas value” lo suficientemente grande como para apostar.
¿Qué es lo que hace la gente normalmente?
Pues, evidentemente, la inmensa mayoría solo apuestan en base a sus conocimientos fubtoleros de Marca o As, y se ponen a apostar en casi todos los encuetros que nos ofrecen los bookies, pensando que son Del Bosque o Aragonés.
Cuando te pones a aposta a lo loco (pensando que apuestas con criterio) al final te acabas dando cuenta de que tu balance empieza a bajar poco a poco pero bastante rápidamente; más rápido a mayor número de apuestas que hagas.
Peor aún, como se te ocurra ponerte la manta en la cabeza y empezar a intentar “recuperar” lo perdido, acabarás descubriendo casi de manera innata cómo funciona el sistema martingala, pero esa es otra historia.
Lo que quiero decir es que la gran mayoría de apostadores verán que su balance está a cero cuando aún no han cumplido ni la mitad de los requisitos para ganar el bono.
¿Por qué?
Pues porque el spread de las apuestas, es decir, la comisión que se quedan las casas, hace que tu cuenta vaya siendo devorada de una manera bastante rápida luego de una serie de las mismas.
De hecho, en el mundo de las apuestas, ese spread puede llegar a ser terrible.
Te voy a poner un ejemplo de hoy día de una casa de apuestas cualquiera española que he visto (la mayoría están en la línea).
Para ello usamos la calculadora de margen de Pinnacle.
En este caso es un partido de baloncesto de la Euroliga con una cuota de 1.14 a 5.
Si hacemos cálculos comprenderíamos que para tener una apuesta de arbitraje equilibrada deberíamos tener 1.14 a 8.2 aproximadamente.
Si te fijas, la diferencia entre 8.2 y 5 es bastante grande.
Si usamos la calculadora, tenemos que el margen es de 7,72%. Lo que nos daría un spread de 0,15 más o menos.
Es decir, sería equivalente a si apostáramos con 1.86 a 1.86.
Aquí vemos que la casa se “come” un 14% de nuestra apuesta.
Esa es su comisión.
En unos casos será mayor, y en unos casos será menor, dependiendo de la liquidez del mercado. Te puedo decir que en Baloncesto en España tendremos ese tipo de spreads de manera bastante habitual, mejorándolo con eventos más importantes, como un Barca – Madrid, obviamente.
Ok, pues si el caso es que apuestas casi a lo “loco”, a tus equipos “favoritos”, vas a estar pagando un 14% de apuesta de entrada a la casa.
A no ser que seas una bestia en tus predicciones o de que tengas mucha suerte en tus apuestas iniciales, lo más normal es que luego de unas 14 apuestas hayas pagado el total de tu apuesta inicial a la casa.
En otras palabras, si ganas 7 veces apostando un euro, te llevas más o menos 6 euros, y si pierdes la misma cantidad de veces, 7, pierdes 7 euros, con lo que tu balance quedaría a cero, partiendo de 1 euro, claro.
Ese euro es la comisión que has pagado a la casa luego de 14 apuestas.
Como vemos, con unos márgenes de este tipo la mayoría de apostantes acabarán liquidados luego de 14 apuestas.
Si los márgenes van mejorando, podrían aguantar 28, 56 o incluso 100 apuestas.
Pero te puedo asegurar que el apostante medio acabará perdiendo su cuenta a base de spreads antes de poder haber cobrado el bono.
Estrategias de apuestas para conseguir bonos
Aparte de las apuestas con valor, hay gente que intenta sacar beneficios con el arbitraje de las apuestas, buscando si se puede dar este tipo de circunstancia comparando las cuotas de los diferentes bookies.
Esto es incluso, más difícil de conseguir que buenas apuestas value, pues este tipo de discrepancias de mercado, si no imposibles, sí son muy escasas y no duran demasiado. Y más escasas aún en el complicado mercado de apuestas español.
Por lo tanto no es un método factible para conseguir esos bonos por volumen.
Otra estrategia muy comentada y que sí podría tener algún sentido de aplicar con criterio y con posibilidades de conseguir volumen sería el conocido “trading de apuestas”, que en su día puso de moda la casa Betfair.
Con el trading entramos en un campo bastante complicado también, porque muchas de las “estrategias de trading” que he visto por la red no son estrategias válidas por razones obvias.
No basta con apostar al empate y cuando marque un equipo hacer lay.
No, eso no te bastará para ganar dinero con el trading, evidentemente.
Tendrás que hilar mucho más fino.
Para ello hay muchos supuestos expertos que enseñan trading en la red, pero casi que te puedo asegurar que muchos de los mismos son cuentos chinos.
Puede que haya alguno que otro que sea decente y ofrezca una visión de trading aceptable, con la cual podamos tener alguna posibilidad de hacer algo en el medio plazo.
No obstante, para aplicar este tipo de estrategia solo podremos hacerlo en Betfair, que es prácticamente la única casa de intercambio donde podemos hacer este tipo de estrategia. Una lástima, porque en otros sitios como el Reino Unido tenemos casas como SMarkets, que son incluso, hasta mejores que Betfair, al menos en comisiones y flexibilidad.
En este sentido, solo puedo decirte que antes de intentar aplicar el trading, intentes estudiar de qué va, y en caso de aplicarlo usa la cantidad más pequeña de fondos posible, ya que bien puede darse el caso de que no ganes.
Las casas y sus bonos de bienvenida
Las casas “regalan” estos bonos por una razón simple: porque saben que el 95% (o más) de los apostantes no logran conseguirlos antes de quedarse a cero.
En este sentido estos bonos son una especie de atracción, de cebo, si usamos la jerga de pesca, que atrae a la gente que va buscando el dinero fácil y que piensa que buscando una bonificación del 100% de sus apuestas va a encontrar la manera de llevarse unos cientos de dólares extra a casa.
La verdad es bastante diferente: y no es otra que para ganar esos bonos, tendremos que o bien tener mucha suerte o bien hilar muy fino.
El primer de los casos no nos interesa, y el segundo es bastante complicado de realizar.
Sin que tengamos que menospreciar dichos bonos de antemano, sí te puedo decir una cosa: si pretendes apostar de una manera más o menos profesional o con sentido común, deberías olvidarte de los mismos e intentar mejorar tu estrategia de apuestas.
¿Y tú, qué opinas de los bonos de apuestas?